Un acuario es el hábitat, el lugar donde vivirán nuestros peces. Se supone que si tenemos una mascota es porque la queremos y si la queremos nos gusta que tengan lo mejor. Nunca será lo mismo que la libertad de nadar por el mar pero desearíamos conseguir que se pareciera lo más posible. Y esto lo sabe cualquiera que haya cuidado en su casa alguna vez peces (del tipo que sea).
Por eso, a la hora de elegir un acuario nos tenemos que fijar en sus características para saber qué necesitan nuestros peces y qué queremos ofrecerles, ya que los acuarios no son todos iguales.
Podemos echar un ojo a cualquiera de las webs que tienen ofertas en acuarios (una sencilla búsqueda en google nos hará el trabajo) para comprobar la diferencia que existen dependiendo de lo que queramos.
Así, si nos decidimos no solo por tener peces en casa sino que queremos comenzar en el mundo de la acuarofilia probablemente nos convenga decantarnos por acuarios con gran capacidad (los hay de 60 litros) que nos permitirán completar una colección con una muy buena cantidad y variedad de peces.
Por otro lado, si lo que queremos tener es algún pez que otro, pero sin dedicarnos mucho tiempo a ello, existen acuarios de menor capacidad, de 16 litros o 24 litros, que nos pueden ser muy útiles.
Por último, si además queremos diseño, un objeto que potencie la belleza de cualquier habitación de nuestra casa, existen acuarios que harán las delicias no solo de nuestros peces, también de nuestros invitados.
Tipos de acuarios
Según la temperatura del acuario, podemos encontrar acuarios de agua fría (10-18 grados) y de agua caliente para peces tropicales (18-30 grados). También los podemos diferenciar por las sales que se disuelven en el agua, encontrando acuarios de agua dulce y de agua salada.
El más habitual es el acuario de agua dulce, ya que el mantenimiento de uno marino o de agua salada requiere más experiencia e inversión de tiempo y dinero.
Asimismo, podemos clasificar los acuarios según las especies que vayan a vivir en el mismo, distinguiendo entre acuario comunitario (en el que cohabitan más de una especie afines entre ellas) y acuario de especie (en el que sólo hay peces de una misma especie).