Son muchas las casas para gatos que hay en el mercado. Diferentes modelos, colores, materiales, etc. Si hemos decidido vivir con un minino, tendremos que elegir su hogar en base a una serie de variables. Por supuesto, la comodidad del animal; pero también que su casa no esté fuera de lugar en la nuestra. Es decir, hablando vulgarmente, que la casa del gato “pegue” con la decoración general del hogar.
Las diferentes casas para gatos
Como en casi todo, dependiendo de lo que queramos o podamos gastarnos, accederemos a un tipo de hogar para el gato u otro. Sólo tenemos que hacer una búsqueda simple en la red para encontrar algunas casas para gatos realmente preciosas. También caras. Las hay, incluso, de dos pisos. ¡Duplex para gatos!
Son varios los aspectos que hay que tener en cuenta a la hora de elegir un buen hogar para nuestra mascota.
- El tamaño: el gato tiene que tener espacio suficiente para moverse. Es su casita, donde se refugiará cuando quiera estar solo, el lugar en el que va a dormir. Por ello hemos de hacernos con una que tenga tamaño suficiente para permitir que el gato pueda andar y darse la vuelta sin problemas.
- Material: obviamente tiene que ser cómoda. Lo habitual es que sean blandas, formadas en el exterior por una especie de grandes cojines con extrañas formas. Dentro, particularmente en el suelo en el que dormirá el gato, suelen tener cartón duro.
- Rascador: ya sabemos que los gatos rascan continuamente; por ello, es importante que en su casa tenga un rascador, probablemente de cartón, para poder llevar a cabo esta práctica tan habitual.
La casa del gato dentro de la casa del humano
Y entramos ahora en el segundo apartado. El de hacer que la casa del gato sea un mueble más del hogar. Normalmente las casas para gatos suelen ser de colores vivos, alegres, aunque, lógicamente, hay variedad cromática para todos los gustos.
También podemos jugar con la forma. La más normal es la típica, igual que la casa de perro de toda la vida, pero existe también un gran escaparate a este respecto. Cuadradas, redondas, con forma de castillo, de taburete, etc.
Lo que debemos lograr es que el gato esté a gusto y nosotros también. Que las casas para gatos se conviertan en un accesorio del hogar.