Quizá algunos piensen que es una leyenda urbana. Pero no es así. Otros, probablemente, no tendrían ni idea de esto y alguna vez habrán tenido un susto: estar con algún amigo o amiga que tiene perro, querer darle un trozo de chocolate al can y que nuestro compañero/a se lance hacia nosotros como un poseso evitando que el exquisito trozo de dulce llegue a la boca de su mascota. Es normal; porque sí, el chocolate es malo para los perros.
Los grandes podrían llegar a admitir una muy pequeña dosis de chocolate, pero mínima. Los pequeños, empero, deben mantenerse alejados de este alimento, ya que puede llegar a provocarles la muerte. Es algo que todos los dueños de canes han de controlar porque, como es normal, al perro sí le gusta el chocolate y, obviamente, él animal no sabe las desgraciadas consecuencias que para él puede tener ingerirlo.
¿Por qué el chocolate es malo para los perros?
La explicación, relativamente científica, nos dice que el chocolate sale de las semillas de árbol de cacao. Uno de sus compuestos es la methylxanthines que, a su vez, contiene cafeína y otras sustancias como la theobromine. Si el perro ingiere estas sustancias puede sufrir diarreas y vómitos. Esto en el mejor de los casos, porque también es probable que tenga temblores y que el corazón se le acelere hasta límites realmente peligrosos.
Es complicado para los perros digerir esta sustancia, por ello es tan contraproducente. Así como los humanos la admitimos sin mayores problemas, aunque también provoca subidas de tensión, los canes tienen verdaderas dificultades.
Una vez confirmado que el chocolate es malo para los perros, tampoco queremos generar una alarma y que todos los que estéis leyendo este artículo empecéis a vigilar al perro día y noche: que nuestra mascota haya chupado un envoltorio de una chocolatina en el parque, no es motivo para ir corriendo al veterinario. Es probable que le veamos ligeramente hiperactivo los momentos posteriores, pero no es preocupante porque no tiene theobromine suficiente como para hacerle daño.
Si, por ejemplo, ha sido capaz de alcanzar la caja de bombones que teníamos en la encimera y ha dado buena cuenta de ella, entonces sí. Salgamos como alma que lleva el diablo hacia el veterinario porque el can está en grave riesgo. El tratamiento habitual es provocar el vómito del can.
También dependerá del chocolate que sea. El negro es mucho más peligroso que el que es simplemente con leche. Para no tener dudas y evitar riesgos indeseados, mejor no darle nunca chocolate al perro. Así seguro que no hay problemas.