Aunque se trata de una enfermedad tampoco demasiado frecuente entre las mascotas puede suceder que los perros sufran narcolepsia, que consiste en episodios de sueño, acompañados generalmente de debilidad muscular, que pueden durar segundos o incluso minutos. También puede manifestarse con una somnolencia excesiva durante el día.
Estos episodios de sueño suelen aparecer en situaciones de excitación como la comida o el juego y se pueden parar con un ruido, tocando al perro, también pueden utilizarse medicamentos… Durante este momento de sueño no existe salivación ni micción y los músculos de los ojos y la respiración no se ven afectados.
Cuando el perro sufre un episodio de narcolepsia, se deja caer boca abajo o sobre un costado, sus músculos quedan flojos y el movimiento queda paralizado. El movimiento de los ojos sí se mantiene, como si entrara en la fase REM del sueño.
Algunos síntomas que nos pueden indicar que nuestro perro está sufriendo narcolepsia son la pérdida repentina de conciencia, la parálisis de extremidades, cabeza y torso, espasmos, gimoteo, etc.
En cuanto a las causas de la narcolepsia, científicos que han estudiado este trastorno en perros han identificado una mutación en un gen del cromosoma 12 que parece que contribuye a que lo sufran. Además, la narcolepsia puede ser hereditaria en razas como el labrador, doberman pinscher o caniches, puede ser debida a un trastorno del nervio o del sistema inmune.
Lo mejor es que el veterinario examine al perro para tratar la narcolepsia y no derive en un problema mayor. Son ataques que pueden asustar pero no suponen amenaza para la vida de nuestra mascota, ya que no experimenta dolor ni sufrimiento durante el episodio. No obstante, si aparecen a menudo, el veterinario puede recetar medicamentos que controlen su duración y su frecuencia.
Deberemos supervisar el día a día de nuestro perro si padece episodios de narcolepsia, sobre todo cuando realice actividades susceptibles de que aparezca, actividades que lo exciten sobremanera como el acto sexual, un ejercicio intenso u otras que puedan alterarlo emocionalmente.