El pez escalar o también llamado pez ángel tiene el cuerpo alto y plano, casi circular. Puede llegar a medir hasta 15 cm de largo y 25 cm. de alto si le damos una dieta rica y variada y las condiciones en las que vive son las mejores, pudiendo sobrevivir entre siete y nueve años. Poseen unas grandes aletas dorsales y anales, triangulares y alargadas y dos más finas y largas. Tienen carácter sociable y normalmente son pacíficos y de fácil convivencia entre ellos (si sus compañeros de acuario son demasiado pequeños puede llegar a verlos como alimento).
El pez escalar necesita un acuario grande y alto en el que pueda convivir con peces de su especie e incluso de otras. La temperatura del agua deberá estar entre los 22 y los 28ºC, filtrada de pH 7-7,6 neutro o ligeramente alcalino y con dureza media alta ligeramente salada (por ejemplo, un gramo de sal gorda por cada litro de agua). Deberemos proporcionarle buena iluminación y decoración y vegetación que se asemeje lo más posible a su hábitat natural, colocándola a los lados y en la parte de atrás del acuario para que tenga sitio para nadar. Deberemos tener en cuenta que disponga de luz suficiente durante ocho a doce horas al día y que permita también el buen crecimiento de las plantas.
Al pez escalar le gusta la comida seca pero deberemos darle con frecuencia alimento vivo como larvas de mosquito, de mosca, dafnias, gambas, gusanos, etc.
En cuanto a su salud, el pez escalar es fuerte pero puede ponerse enfermo con dolencias habituales de los peces de acuario, y ya en ejemplares adultos pueden aparecer afecciones en los ojos tipo cataratas que les provocan ceguera e incluso pueden llegar a morir por inanición.
Foto: PetClic.